Por: Lcda. Greishka Maestre Salva, Nutricionista de Triple-S

 

Los suplementos alimenticios están diseñados para reforzar y aportar a la dieta de una persona que así lo amerite. Estos pueden encontrarse en diferentes presentaciones, tales como tabletas, cápsulas de geles blandos, polvos, barras, gomitas y líquidos.

A continuación, te presento algunos mitos y realidades de los suplementos nutricionales.


Mito #1:

Los suplementos nutricionales reemplazan un patrón (dieta) de alimentación saludable.

Realidad:

Los suplementos nutricionales no están destinados a reemplazar un patrón de alimentación saludable. De hecho, siempre y cuando puedas ingerir alimentos a través de la vía oral de forma segura, es preferible que obtengas todos los nutrientes necesarios para tu cuerpo por medio de estos.


Mito #2:

Todas las personas deberían ingerir suplementos nutricionales.

Realidad:

  • No todas las personas deben o necesitan ingerir suplementos nutricionales. Si tienes un patrón de alimentación saludable, donde realices tus 3 comidas del día (y meriendas, de ser necesario) e incluyas carbohidratos, proteínas, lácteos, frutas y vegetales (sin olvidarte del agua), no es necesario que te suplementes.
  • Se puede recomendar el uso de suplementos de Vitamina D durante los primeros días de vida en infantes que son exclusivamente lactados o que son alimentados de forma combinada (fórmula y leche materna). De igual forma, entre los 4-6 meses de vida se sugiere la suplementación de hierro en infantes exclusivamente lactados.
  • Mujeres en edad reproductiva deben consumir 400mcg por día de ácido fólico. Por lo que se recomienda que además de ingerir alimentos que contienen ácido fólico, suplementen o añadan alimentos fortificados con ácido fólico para reducir el riesgo de desórdenes congénitos.
  • Adultos mayores (65 años o más) pueden necesitar suplementación de B12 y Vitamina D, ya que a medida que envejecemos puede ser difícil absorber estos nutrientes.
  • Personas con diferentes condiciones de salud como enfermedad celiaca, con restricciones de alimentos por alergias, patrones de alimentación veganos o vegetarianos, posterior a cirugías mayores, que presenten dificultad para masticar/tragar, que hayan perdido peso o masa muscular de forma involuntaria en un corto periodo de tiempo, entre otras, pueden requerir el uso de suplementos nutricionales para aportar los nutrientes que a través de los alimentos no pueden obtener o no son suficientes para cubrir las necesidades particulares que puedan presentar en ese momento.

Mito #3:

Si tengo alguna restricción de alimentos, automáticamente tengo deficiencia de nutrientes.

Realidad:

Aunque ciertamente el tener alguna restricción de alimento puede limitar la ingesta de ciertos nutrientes, no necesariamente significa que tendrás deficiencias nutricionales. Todo va a depender de las restricciones en particulares y tu patrón de alimentación. Es importante destacar que:

  • Personas con alergias a alimentos pudieran presentar ciertas deficiencias nutricionales si no consumen alimentos que puedan sustituir los nutrientes de aquellos alimentos a los que se presentan alergias.
  • Personas con un patrón de alimentación vegetariano o vegano pudieran presentar deficiencias de Vitamina B12, entre otros nutrientes de no sustituir los nutrientes que provienen de las fuentes de proteína animal.

Mito #4:

Todos los suplementos nutricionales son beneficios.

Realidad:

Los suplementos alimenticios/nutricionales poseen múltiples beneficios para aquellas personas que lo necesitan.

  • Algunos ejemplos:
    • Suplementos altos en calorías o proteínas pueden serte sugeridos de presentar una pérdida de peso abrupta de forma involuntaria o que no puedas llegar a tus requisitos nutricionales a través de la vía oral.
    • Suplementos de vitaminas y minerales son recomendados en infantes, mujeres en edad reproductiva y adultos mayores. Pueden ser sugeridos en personas con ciertas condiciones de salud o alergias a alimentos si se identifica la necesidad.
  • Sin embargo, el uso de suplementos alimenticios o nutricionales podría significar un riesgo en personas que a través de los alimentos pueden obtener o cumplir con sus requisitos nutricionales y que no poseen ninguna deficiencia.

Recuerda que antes de tomar cualquier suplemento, lo ideal es consultarlo con tu médico y con tu Nutricionista-Dietista. Un Nutricionista-Dietista licenciado te puede ayudar a identificar si necesitas suplementación o te puede indicar que alimentos contienen los nutrientes de los cuales presentas deficiencia y como combinarlos para maximizar sus beneficios.

Tu bienestar empieza con decisiones informadas. ¡Habla con un experto en nutrición y cuida tu salud desde adentro!