Por: Lcda. Shaira E. Ortiz Ramos, Nutricionista de Triple-S
El kéfir es una bebida cremosa, que cada vez gana más popularidad entre quienes buscan mejorar su alimentación y cuidar su salud. Pero ¿qué tiene de especial esta bebida antigua? ¿Por qué tantas personas la incluyen en su alimentación diaria? En este artículo exploraremos sus beneficios nutricionales y te compartiré una receta sencilla para que lo disfrutes en casa.
Un tesoro con historia
El kéfir se originó en la región montañosa del Cáucaso Norte. Se obtiene mediante un proceso de fermentación, utilizando unos granos de kéfir que contienen una mezcla natural de bacterias lácticas, levaduras y polisacáridos. Actualmente, el kéfir puede elaborarse con agua, leche de vaca, leche sin lactosa o incluso en versiones vegetales, usando leche de soya o bebida de almendras. Lo que lo hace accesible a diferentes estilos de vida y necesidades nutricionales.
Beneficios nutricionales del kéfir
- Rico en probióticos: El kéfir es uno de los alimentos más ricos en probióticos. Estos favorecen la digestión, ayudan a equilibrar la flora intestinal y alivia problemas digestivos como: gases, estreñimiento.
- Fuente de proteínas: En promedio, 1 taza de kéfir de leche de vaca baja en grasa contiene: 9 a 11 gramos de proteína, dependiendo de la marca y el tipo de leche utilizada.
- Ofrece vitaminas y minerales: Aporta vitaminas del complejo B, vitamina K, calcio, magnesio, potasio, zinc y fósforo, los cuales apoyan la salud ósea, nerviosa e inmunitaria.
- Refuerza el sistema inmunológico: Se ha observado que el kéfir puede estimular las defensas del cuerpo. Contiene un compuesto llamado kefirán, con propiedades antimicrobianas y antiinflamatorias.
¿Cómo disfrutar el kéfir en tu rutina diaria?
Aunque se disfruta solo, el kéfir es muy versátil. Puedes añadirlo a batidos, usarlo como base de aderezos, salsa o incluso como sustituto del yogur en muchas recetas.
Aquí te dejo una receta rápida y deliciosa:
Batido de Kéfir con Frutas y Avena
Ingredientes (1 porción):
- 1 taza de kéfir plain sin azúcar añadida y bajo en grasa
- ½ taza de fresas frescas o congeladas
- ½ guineo maduro
- 2 cucharadas de avena en hojuelas
Preparación:
- Coloca todos los ingredientes en la licuadora.
- Procesa hasta obtener una mezcla cremosa y homogénea.
- Sirve en un vaso, añade unos cubitos de hielo si deseas y disfruta al instante.
El kéfir reúne tradición y beneficios en un mismo vaso. Su contribución a mejorar la digestión, reforzar el sistema inmune y su aportación de vitaminas y minerales lo convierten en un aliado para integrarlo en nuestra alimentación diaria. Lo mejor de todo es que su versatilidad y sencillez de preparación lo hacen ideal para cualquier momento del día. Recuerda si deseas incorporar el kéfir en tu patrón de alimentación y presentas preguntas o dudas es ideal que consultes con tu médico y con tu Nutricionista-Dietista.
¿Te animas a probarlo? Es un buen momento para empezar a disfrutar de todos sus beneficios.